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Diagnóstico de espasmo hemifacial

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El espasmo hemifacial es una afección en la que los músculos de un lado de la cara se contraen involuntariamente. Estos espasmos pueden empeorar progresivamente y provocar dificultad para abrir el ojo del lado afectado, tensión facial, vergüenza social resultante y dificultad con la visión normal. La gravedad de los síntomas puede variar de persona a persona. En algunos casos, los espasmos incapacitantes pueden llegar a hacer que incluso tomar un sorbo de café por la mañana sea un desafío.

Estos síntomas pueden superponerse con los de otras afecciones que implican movimientos anormales de la cara y, lamentablemente, el diagnóstico puede resultar difícil de alcanzar durante años. Sin embargo, con un diagnóstico y tratamiento adecuados, muchas personas pueden disfrutar de una vida libre de estos frustrantes espasmos.

El retraso en el diagnóstico puede ser una de las partes más desafiantes de este trastorno. El diagnóstico y la cirugía tempranos y correctos realizados por manos experimentadas pueden proporcionar una cura temprana y prevenir los efectos secundarios asociados con otros tratamientos, incluidos los medicamentos y las inyecciones de Botox.

¿Cómo sé si tengo espasmo hemifacial?

La afección a menudo comienza con espasmos que ocurren alrededor de los ojos. Los amigos o familiares pueden ser los primeros en señalar estos síntomas. Con el tiempo, los espasmos pueden progresar a otros músculos faciales del mismo lado y aumentar en intensidad. Algunos síntomas comunes incluyen los siguientes:

  • Contracciones o espasmos indoloros de los músculos de un lado de la cara.
  • Espasmos que ocurren durante el sueño.
  • Dificultad para cerrar o abrir el ojo del lado afectado.
  • Sensación de tirantez o malestar facial.

Si experimenta alguno de estos síntomas, es importante que consulte a un proveedor de atención médica, quien podrá realizar un examen físico y podría solicitar pruebas adicionales para ayudar a determinar la causa de sus síntomas. El espasmo hemifacial puede tener diversas causas y el tratamiento dependerá del problema subyacente. Su médico podrá recomendarle las opciones de tratamiento adecuadas para su situación específica. Debe solicitar una derivación temprana para una evaluación quirúrgica de su neurólogo a un neurocirujano experimentado y debe evitarse el uso excesivo de inyecciones de Botox.

¿Cómo se diagnostica el espasmo hemifacial?

Para determinar si tiene espasmo hemifacial, se requieren un historial médico completo, un examen físico y pruebas de diagnóstico. Asegúrese de consultar a un profesional de la salud para obtener un diagnóstico y un plan de tratamiento adecuados.

El diagnóstico generalmente comienza con un examen físico. Su médico buscará cualquier signo de contracciones o espasmos musculares en un lado de la cara. También es posible que le pidan que haga varias expresiones faciales para evaluar cualquier dificultad que tenga para realizar movimientos faciales normales.

Los hallazgos del examen físico en pacientes con espasmo hemifacial pueden incluir contracciones musculares involuntarias o espasmos en un lado de la cara, especialmente alrededor del ojo o la boca. Estas contracciones pueden ser intermitentes o continuas y pueden variar desde espasmos leves hasta movimientos más pronunciados que dificultan la realización de expresiones faciales normales.

Su médico también podría ordenar pruebas de diagnóstico para confirmar el diagnóstico de espasmo hemifacial. Una prueba comúnmente utilizada es la electromiografía (EMG), que mide la actividad eléctrica de los músculos faciales. La EMG puede ayudar a identificar contracciones musculares anormales o espasmos en la cara.

Otra prueba de diagnóstico que su médico podría utilizar es la resonancia magnética (RM) del cerebro. La resonancia magnética puede ayudar a identificar cualquier anomalía estructural que pueda estar causando la compresión o irritación del nervio facial, que es la causa subyacente del espasmo hemifacial. Hay varios hallazgos que se pueden observar con una resonancia magnética en un paciente con espasmo hemifacial:

  • Compresión o contacto del nervio facial por un vaso sanguíneo: el espasmo hemifacial suele ser causado por la compresión del nervio facial por un vaso sanguíneo vecino. A veces, este vaso sanguíneo se puede ver en una resonancia magnética normal y, en ocasiones, es posible que se necesite una resonancia magnética de mayor resolución.
  • Otras anomalías estructurales: en casos raros, el espasmo hemifacial puede ser causado por la compresión del nervio facial por otras causas, como un tumor cerebral o una malformación arteriovenosa.

Tenga en cuenta que no todos los pacientes con espasmo hemifacial tendrán alguna anomalía visible y, en algunos casos, la causa de los espasmos no se puede identificar mediante estudios de imágenes.

¿Qué enfermedades imitan el espasmo hemifacial?

Varias condiciones pueden imitar los síntomas del espasmo hemifacial, incluidas las siguientes:

  • Trastornos de tics: los trastornos de tics, como el síndrome de Tourette, pueden provocar movimientos faciales involuntarios o espasmos. A diferencia del espasmo hemifacial, los trastornos de tics suelen afectar a ambos lados de la cara.
  • Epilepsia: algunos tipos de epilepsia pueden causar espasmos faciales. A diferencia del espasmo hemifacial, la epilepsia puede presentarse con otros movimientos anormales en regiones más allá de la cara y causar otros síntomas.
  • Blefaroespasmo: esta afección provoca contracciones o espasmos involuntarios de los músculos alrededor de los ojos, lo que puede hacer que los ojos se cierren con fuerza, se contraigan o parpadeen repetidamente. El blefaroespasmo puede causar malestar, sensibilidad a la luz y dificultad con la visión. A diferencia del espasmo hemifacial, el blefaroespasmo afecta a ambos lados de la cara y no progresa para afectar otras áreas.
  • Mioquimia facial: esta afección se caracteriza por contracciones u ondulaciones involuntarias de los músculos de la cara. Las contracciones suelen ser visibles y pueden ocurrir en un músculo específico o en un grupo de músculos (consulte más información sobre esta afección a continuación).

¿Cómo se ve la mioquimia?

La mioquimia es una afección caracterizada por contracciones u ondulaciones involuntarias de los músculos. Las contracciones pueden ser sutiles y pueden ocurrir en muchos lugares. El músculo afectado puede contraerse repetidamente durante un período de tiempo y luego las contracciones pueden detenerse por un tiempo antes de comenzar de nuevo. Las contracciones pueden ser más notorias cuando el músculo está en reposo y pueden ser menos notorias cuando el músculo está en uso.

En la mioquimia facial, las ondulaciones pueden aparecer como movimientos similares a los de un gusano debajo de la piel y pueden ser difíciles de notar a menos que se observe la cara de cerca. Los pacientes con mioquimia facial a veces también informan sentir que tienen la cara rígida. A diferencia del espasmo hemifacial, la mioquimia facial puede desaparecer después de varias semanas.

Diferenciar entre el espasmo hemifacial y otras afecciones similares requiere la experiencia de un especialista en espasmo hemifacial, como un neurólogo o un neurocirujano. Cada espasmo puede tener características únicas y síntomas reveladores sutiles que pueden ser difíciles de distinguir sin formación médica.

¿A qué especialista debería de ver si tengo espasmo hemifacial?

El especialista más adecuado para tratar el espasmo hemifacial depende de la causa subyacente de la afección. En algunos casos, el espasmo hemifacial puede ser tratado inicialmente por un neurólogo, que se especializa en el diagnóstico y tratamiento de trastornos neurológicos. En otros casos, puede ser necesaria una cirugía para aliviar la compresión o irritación del nervio facial. En estos casos, se debe consultar a un neurocirujano experimentado para realizar el procedimiento quirúrgico necesario.

Conclusiones clave

  • El diagnóstico de espasmo hemifacial implica una anamnesis y un examen físico completos y una prueba de imágenes como una resonancia magnética.
  • Los síntomas del espasmo hemifacial pueden superponerse a los de otros trastornos del movimiento de la cara.
  • Si a usted o a un ser querido le han diagnosticado espasmo hemifacial, busque un neurocirujano experimentado para recibir el tratamiento y manejo adecuados.

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