Radioterapia para el espasmo hemifacial

• ¿Cómo me deshago de los espasmos hemifaciales?
• ¿Qué es la radioterapia?
• Radioterapia para el espasmo hemifacial
• Tipos de radioterapia
• ¿Cuáles son los riesgos y efectos secundarios de la radioterapia?
• ¿Quçe supone la radiocirugía estereotáxica?
• Tratamiento de enfermedades similares

El espasmo hemifacial (EHF) es un trastorno de hiperactividad de los nervios craneales que provoca contracciones involuntarias de los músculos faciales de un lado de la cara. Estos espasmos suelen ser causados por la compresión del nervio facial por un vaso sanguíneo. Los espasmos faciales generalmente comienzan alrededor del ojo y eventualmente afectan a otros músculos faciales del mismo lado.

Aunque el espasmo hemifacial no pone en peligro la vida ni es doloroso, es una enfermedad frustrante que puede afectar muchos aspectos de la vida. Los cambios cosméticos de los espasmos pueden interferir con las interacciones sociales y causar vergüenza pública, lo que genera estrés y ansiedad que pueden exacerbar aún más los síntomas.

Algunos casos de espasmo hemifacial se resuelven por sí solos o entran en un período de remisión después de varios meses o años. Sin embargo, en la mayoría de los casos los espasmos persistirán o empeorarán con el tiempo. Afortunadamente, el espasmo hemifacial es una afección tratable. Más del 85% de los pacientes experimentan una curación duradera y un alivio de los síntomas después de la cirugía de descompresión microvascular.

Sin embargo, no todos los pacientes son buenos candidatos para la cirugía. En esos casos tan infrecuentes, se pueden recetar medicamentos como onabotulinumtoxinA (Botox, Allergan Aesthetics, Irvine, CA), anticonvulsivantes o relajantes musculares. Si los espasmos hemifaciales siguen siendo graves e interfieren significativamente con su vida, se puede intentar la radioterapia.

La radioterapia utiliza haces de alta energía para apuntar y eventualmente dañar las células en un lugar específico.

El uso de radioterapia para el espasmo hemifacial es relativamente poco común. Sin embargo, se puede considerar la radioterapia para pacientes con espasmo hemifacial resistente a otras opciones de tratamiento, para personas que no pueden someterse a cirugía o para controlar el crecimiento de un tumor benigno que presiona el nervio facial. A continuación, se detallan varios usos de la radioterapia para el espasmo hemifacial.

Se han realizado radiocirugía y radioterapia fraccionada para casos de espasmo hemifacial con el objetivo de dañar el nervio facial lo suficiente como para evitar que se dispare y provoque contracciones faciales. Actualmente, los datos de resultados se limitan a un pequeño número de pacientes, aunque la mayoría experimentó una reducción gradual de los síntomas de espasmo a las pocas semanas o meses del procedimiento. Debido a los tiempos de seguimiento relativamente cortos, las tasas de recurrencia no están claras.

Aunque la compresión del nervio facial de un vaso sanguíneo es a menudo lo que conduce al espasmo hemifacial, un tumor que afecta el nervio facial es otra posible causa. Para los tumores benignos y de crecimiento lento, es posible que la cirugía no sea necesaria. En tales casos, se puede utilizar una opción de tratamiento menos invasiva, como la radiocirugía, para reducir el tamaño del tumor lo suficiente como para aliviar los síntomas del espasmo hemifacial.

Aunque la radioterapia es una opción de tratamiento establecida para otros trastornos nerviosos compresivos como la neuralgia del trigémino, no se usa ampliamente en el tratamiento del espasmo hemifacial. Por tanto, la evidencia sobre su eficacia, tasas de recurrencia y complicaciones es limitada. Será importante analizar los posibles riesgos y beneficios de la radioterapia con su neurocirujano para determinar si es adecuada para usted.

La radioterapia se puede administrar como una dosis pequeña en múltiples sesiones cortas (radioterapia fraccionada) o como una dosis grande en una única sesión más larga (radiocirugía estereotáctica). La palabra "estereotáctica" se utiliza para describir técnicas de guía de imágenes que permiten el posicionamiento preciso de haces de radiación en una ubicación objetivo dentro del cuerpo. El nombre "radiocirugía" proviene de su naturaleza altamente precisa, aunque no es una cirugía real. La radiocirugía estereotáxica se realiza a través de 3 tipos diferentes de sistemas:

• Gamma Knife: Gamma Knife utiliza haces de rayos gamma (fotones) para apuntar al nervio facial o al tumor causante. Los haces individuales convergen en el lugar objetivo para proporcionar una alta dosis de radiación.
• Sistemas basados en aceleradores lineales (por ejemplo, CyberKnife, Novalis): los sistemas de aceleradores lineales (LINAC) enfocan haces de rayos X (fotones). Estos sistemas tienen la capacidad única de moverse alrededor del paciente, lo que permite diferentes ángulos para acercarse mejor al objetivo y minimizar la radiación a los tejidos circundantes.
• Partículas cargadas pesadas (p. ej., haz de protones): la terapia con partículas cargadas pesadas enfoca las partículas (protones) en un objetivo específico. En comparación con los fotones utilizados en otras formas de radiocirugía estereotáxica, los protones pueden concentrar la mayor parte de su energía en la ubicación objetivo y minimizar la exposición a la radiación en áreas cercanas. Esta es una forma relativamente nueva de radiocirugía estereotáxica que se encuentra sólo en centros especializados del mundo.

Los posibles efectos secundarios de la radioterapia para el espasmo hemifacial incluyen entumecimiento o debilidad facial, pérdida de audición, dolor de cabeza, fatiga, ronquera o alteración de la coordinación. Cuando la ubicación objetivo es pequeña y está lejos de otras estructuras críticas, el riesgo de efectos secundarios y complicaciones es generalmente bajo.

Una sesión de radiocirugía estereotáxica para tratar el espasmo hemifacial probablemente implicará los siguientes pasos. El proceso completo puede ocupar toda la mañana o la tarde, pero la duración real del tratamiento puede ser sólo de 1 o 2 horas. La mayoría de los pacientes regresan a casa el mismo día.

• Preparación: Se fija un marco para la cabeza al cuero cabelludo y al cráneo con pines especiales que penetran el cráneo unos pocos milímetros para inmovilizar la cabeza durante el procedimiento.
• Pruebas de imagen: se solicitará una resonancia magnética (RM) para determinar la ubicación del nervio o tumor y planificar la trayectoria de la radiación.
• Tratamiento: Lo colocarán debajo de la máquina de radiación con la cabeza primero. La administración de radiación es indolora y puede tardar entre 1 y 2 horas.
• Recuperación: Se retira el marco de la cabeza. Es posible que experimente un sangrado leve y hormigueo en los lugares donde se colocan los pines. Se pueden mandar sesiones de radiocirugía adicionales, aunque normalmente sólo se requiere una sesión.

Un trastorno similar pero en última instancia diferente de los espasmos hemifaciales es la mioquimia facial. En contraste con las contracciones intermitentes obvias de los espasmos hemifaciales, la mioquimia facial se presenta con contracciones continuas sutiles de los músculos faciales que pueden afectar múltiples partes de la cara.

Estas contracciones pueden aparecer como ondas de parpadeo o movimientos parecidos a gusanos debajo de la piel que a veces no son evidentes hasta que se examinan de cerca. A diferencia de los espasmos hemifaciales, la mioquimia facial suele resolverse por sí sola al cabo de unas semanas o meses. El tratamiento de la mioquimia facial a menudo implica inyecciones de Botox si es persistente o grave.

• La radioterapia es una opción de tratamiento no invasivo para el espasmo hemifacial que puede considerarse en ciertos casos muy raros.
• Actualmente, la radioterapia no se utiliza ampliamente en el tratamiento del espasmo hemifacial.
• La cirugía sigue siendo la única opción para curar el espasmo hemifacial.
• Los datos sobre la eficacia, la recurrencia y las complicaciones de la radioterapia para el espasmo hemifacial se limitan a informes de casos y series de casos pequeñas.

• Asociación Americana de medicina electrodiagnóstica y neuromuscular
• Instituto Nacional de enfermedades neurológicas e ictus